Las múltiples formas en que la UC ha respondido a la pandemia
La participación en la Mesa Social Covid-19, el convenio con el laboratorio chino Sinovac Biotech Ltd., y el programa “Esperanza Covid-19”, entre otros proyectos en sectores de alta vulnerabilidad, son algunos ejemplos del rol público asumido en este tiempo la universidad.
Desde el estallido social, y sobre todo en medio de la compleja realidad sanitaria, la Universidad Católica ha estado presente en la discusión nacional. En esa línea, ha tenido un rol público clave por medio de, por ejemplo, la Mesa Social Covid-19, donde participa desde un comienzo el rector Ignacio Sánchez. Esta instancia gubernamental reúne a ministros de Estado, a los rectores de la Universidad de Chile y la Universidad Católica, representantes de municipalidades, del Colegio Médico y expertos en salud, entre otros actores. En este contexto, la casa de estudios está impulsando cuatro líneas de trabajo para afrontar desde la investigación la pandemia del coronavirus, entre las cuales se incluye una estrategia para incrementar la capacidad de detección y el número de exámenes, el desarrollo de una vacuna y el trabajo interdisciplinario para responder diversos desafíos de la crisis sanitaria.
Asimismo, la UC ha colaborado en la contención de la pandemia a través de proyectos de investigación como la creación de una vacuna contra el Sars-CoV-2, y el convenio de colaboración con el laboratorio chino Sinovac Biotech Ltd. Mediante el programa “Esperanza Covid-19”, en tanto, que se efectúa en conjunto con BHP, se está llevando a cabo un sistema de detección rápida del coronavirus para 150 mil personas; así también ha presentado otros apoyos en sectores de alta vulnerabilidad. Esto se realiza a través de centros de atención primaria en el área suroriente de la Región Metropolitana, en la Región de Antofagasta y en Iquique. La estrategia, que recibió un aporte de $ 4.500 millones por parte de BHP, considera entre otros puntos, la elaboración de un sistema de derivación oportuna de los casos graves, el aislamiento precoz efectivo y un seguimiento clínico de las personas contagiadas.
A nivel interno, la temprana planificación del trabajo a distancia ha permitido continuar con las labores profesionales y con el calendario académico, apoyando además a los estudiantes con becas de conectividad y equipos, así como con una flexibilización y rebaja de aranceles. El rector, por su parte, ha tenido permanente contacto con los funcionarios a través de reuniones virtuales. Junto a esto, se han establecido algunos recesos con el fin de resguardar la salud mental de la comunidad.